En este tipo de viajes, de mochilera, en solitario, siempre hay sorpresas y es lo que les hace más atractivos. Viajas sola con la libertad de decidir donde ir, que hacer y con quien estar, sin tener que consultar a nadie. Es muy fácil, de esta manera conectar con gente en el camino, en los transportes, en las casas de huéspedes, en las calles.
Encuentras a viajeros como tu, que te ayudan, que te pasan información, que te ofrecen sus casas en sus países correspondientes, que te acompañan durante un trayecto y que te ayudan con el equipaje, con sus conversación y con su compañía. Quizás no vuelvas a verlos mas, o por el contrario, te los vuelvas a encontrar en otro país por coincidencias del destino. Esto último es muy común. Entonces se establece una amistad mas profunda y continuada, cruzándonos correos electrónicos para saber de nuestros respectivos viajes.
Mireia y Hugo
Ya en Brasil, los encuentros se fueron sucediendo, como ha venido sucediendo hasta ahora en Ecuardor y Colombia, con personas afines de todas las edades y de todas las partes del mundo, con sus proyectos, sus ilusiones y sus ganas de viajar y conocer nuevas culturas. Miréis, catalana y Hugo argentino con los que nos encontramos y reencontramos en varias ciudades brasileñas, Atins, la isla de Boipeba compartiendo risas, baños en las playas, paseos por las dunas y viajes en barco, junto a Lauro un periodista paulista. Visita a su casa en Posadas, en el estado de Misiones en Argentina, antes de que Mireia volviera a Barcelona.
Bruno, de 19 anos estábamos hospedados en el mismo Hostal de la Juventud en Pelourinho en Salvador, y después de escuchar una entrevista que me hizo la televisión se acerco a mí, nos presentamos, charlamos, y nuestro encuentro duro tres días hasta que nos separábamos pues llevábamos distintos caminos. También paulista, estudiante de Ciencias Sociales, educado amable, y con un coco muy bien amueblado. Un hombre actual, compartiendo las mismas ideas y preocupaciones que yo. Interesado por la cultura, el medio ambiente y con una conversación rica impropia de su edad. Descubriendo y aceptando su homosexualidad, la aceptación por parte de la familia, los amigos, su entorno.
En la Isla de Boipeba el encuentro con Gloria, en los cincuenta, nieta de Mapuches, chilena, de madre Alemana y padre Mapuche. La historia familiar no tiene nada que envidiar a la Masai Blanca. Una mujer pequeña pero con una gran fuerza, iba por su quinto matrimonio, y siempre viviendo de la artesanía. Compartí su hogar, sus amistades y paseos con su pareja por los caminos de arena hacia Morere para escuchar música bajo las estrellas.
Bruno.
Y para broche de oro, y cerrar el viaje a Brasil, el valiosísimo encuentro con el matrimonio Concepción, José Maria y Mari Pepa, que abrieron sus corazones y me introdujeron en el intimo mundo del Obispo Emerito de Sao Félix de Araguaia, Don Pedro de Casaldaliga. Don Pedro, me acogió en su calido y humilde hogar como si fuera una persona de su mas cercano entorno, como lo son los padres Pablo y Felix.
Jordi Pérez, joven catalán, voluntario, también estaba en el entorno cercano de Dom Pedro, esta aprendiendo la sabiduría del maestro, y a la llamada ha respondido con iniciar sus estudios de Teologia o en Brasil o en El Salvador. Siempre hay tiempo...
Estas personas hacen que los viajes se enriquezcan todavía más.
Felix y Pablo
Jordi Pérez, joven catalán, voluntario, también estaba en el entorno cercano de Dom Pedro, esta aprendiendo la sabiduría del maestro, y a la llamada ha respondido con iniciar sus estudios de Teologia o en Brasil o en El Salvador. Siempre hay tiempo...
Estas personas hacen que los viajes se enriquezcan todavía más.
Felix y Pablo
Charo querida, gracias por compartir con nosotros. Por esas risas y esas conversaciones...Durante un breve tiempo y de manera intermitente formamos una pequeña familia. En los viajes pasan estas cosas, viajeros, personas que se convierten en esenciales por azar o no. Quién sabe... Me encantó verte en Posadas y creo que tu presencia no fue casual. Que sigas el viaje con esa energía tan tierna y explosiva al mismo tiempo.
ResponderEliminarUn beso desde Barcelona, Mireia
Charo Maestra!!!
ResponderEliminarGracias por visitarnos en Posadas y por esos momentos inolvidables de charlas y alegrías que nos brindaste a lo largo de tantos encuentros viajeros. Ojalá sigamos encontrándonos para compartir anécdotas viajeras por este mundo que ya parece un pañuelo.
Abrazo desde Posadas!!
Hugo